Oaxaca es un estado del sur de México conocido por sus culturas indígenas. Su ciudad capital, que lleva el mismo nombre, tiene edificios coloniales, a menudo construidos con piedra volcánica verde. En la plaza principal, El Zócalo, se alza la Catedral de Oaxaca, de estilo barroco. Fuera de la ciudad los sitios arqueológicos precolombinos incluyen Yagui, Mitla y Monte Albán, la capital Zapoteca que data de alrededor de 500 antes de Cristo.
Quien visita Oaxaca se lleva una visión de México distinta a la que ya conocía. Es una de las ciudades coloniales mexicanas más hermosas de todo el país. Es sinónimo de diversidad y unión, pueblos que conservan tradiciones ancestrales y bellezas naturales.
Su centro histórico es considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. La visita puede iniciarse en Los Portales, tomar un rico café a la sombra de enormes árboles de laurel, o bien un humeante chocolate o mezcal con gusanito y sal al gusto.
En Oaxaca hay muchísimas actividades para realizar: el primer día es recomendable hacer un recorrido por el Centro Histórico de Oaxaca en el tranvía turístico, hay varios horarios, siendo uno de los más atractivos el que sale alrededor de las 19 horas y lo mejor es escoger asientos a los extremos; es muy interesante disfrutar las panorámicas del centro de Oaxaca por la noche, además hay menos tráfico.
Al día siguiente de la llegada a Oaxaca se puede visitar la antigua capital de los Zapotecas: Monte Albán. Esta impresionante zona arqueológica se encuentra a una altura de casi 2.000 metros sobre el nivel del mar, sobra decir que la vista del Valle de Oaxaca desde allí es imponente.
Monte Alban está formada por una gran plaza rectangular rodeada de palacios, templos. En la zona se puede conocer un pequeño museo: recomendable pedir la asesoría de un guía (pregunta por el precio). Llegar lo más temprano que se pueda y llevar mucha agua, una gorra o sombrero para protegerse del calor. Horarios de visita: 8 a 17 horas, de lunes a domingo. Los domingos los mexicanos entran gratis.
Otra opción para conocer en los alrededores de Oaxaca es la zona arqueológica de Mitla, cuyo nombre es de origen Náhuatl y significa “Lugar de los Muertos”. Fue un antiguo centro ceremonial y se destaca por su extraordinaria decoración en grecas que tienen varios de sus muros, únicos en Mesoamérica. En la entrada de esta zona arqueológica venden artesanías oaxaqueñas muy bonitas y además económicas.
Ya que el paseo es por Mitla, en los alrededores de este Pueblo hay fábricas de mezcal, visitarlas te llevará a saber un poco más de esta famosa bebida de Oaxaca. La mayoría de estas fábricas de mezcal se encuentran cerca una de la otra sobre la carretera que une los pueblos de Mitla y Matatlán, durante el viaje se observan los campos de agave verde conocido como “Espadin”. Por supuesto, también es un buen pretexto para llevarse a un muy buen precio algunas botellas de esta bebida.
De regreso a la ciudad de Oaxaca, hay varios recorridos para conocer esta hermosa capital, incluso en varios días, donde hay de todo y para todos los gustos: dependiendo de los días de estadía en Oaxaca, para una meticulosa selección sobre los lugares: Los Arquitos de Xochimilco, Museo Casa Juárez, Templo del Carmen, Templo de la Preciosa Sangre de Cristo, Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca, Plazuela del Carmen Alto, Instituto de Artes Gráficas, Museo Regional de Oaxaca, Templo de Santo Domingo, Iglesia de San Agustín, Palacio de Gobierno, Teatro Macedonio, Ex Convento de Santa Catalina de Siena, Jardín Antonia Labastida, Zócalo Catedral, Mercado de Artesanías, Templo de San Juan de Dios, Mercado 20 de Noviembre, Mercado Benito Juárez, Templo de la Compañía de Jesús, Iglesia del Carmen Bajo, Museo Rufino Tamayo, Templo de San José, Plaza de la Danza, Ex Convento de la Soledad Jardín Sócrates,Templo San Cosme y San Damián,Templo de San Felipe Neri, Ex Convento Betlemitas, Paseo Juárez,Templo San Matías Jalatlaco, Templo del Patrocinio, Andador Macedonio Alcala.
En los alrededores
Santa María el Tule -para conocer el famoso árbol del Tule-; Teotitlán del Valle: conocer los exquisitos telares domésticos con diseños de códices, hasta reproducciónes de pinturas famosas como Mtisse, Toledo y Picasso; Santa Ana del Valle: es un pueblo dedicado a la elaboración de textiles de lana, jorongos y sarapes; Tlacolula: los domingos se instala aquí un mercado muy colorido y con carácter indígena; Hierve el Agua: Se trata de unas cascadas fosilizadas de unos 30 metros de altura formadas por agua carbonatada que cae de manantiales; San Martin Tilcajete: famoso pueblo dedicado a la elaboración de alebrijes; Santo Tomas Jalieza: famoso por su mercado de cinturones artísticos, rebozos, trajes típicos, chales y huipiles entre otros textiles.
En el centro histórico hay pequeñas agencias de viajes que ofrecen tours y recorridos para conocer todos esos lugares cercanos a Oaxaca a precios muy económico
La mayoría de los hoteles en el centro histórico son cómodos y de excelente atención, hay también hostales. Hospedarse en el centro histórico es una buena opción, ya que hay varios parques y plazas a las que se puede llegar a pie sin necesidad de tomar el transporte público.
Fiesta patronal
La Geulaguetza es una celebración que tiene lugar en la ciudad de Oaxaca de Juárez. Forma parte de los cultos populares a la Virgen del Carmen, razón por la cual se celebra los dos lunes más cercanos a la festividad cristiana de esa advocación mariana.
Esta fiesta también se conoce como Los Lunes del Cerro, puesto que el corazón de la festividad es en el Cerro Fortín, que domina el centro de la ciudad de Oaxaca. En su concepción más amplia, la Guelaguetza representa no sólo cooperar, sino hace referencia a los tiempos antiguos. El encuentro también representa toda una actitud o cualidad con la que se nace, el amor al prójimo de cada habitante zapoteca hacia sus hermanos, una actitud de compartir la naturaleza a la vida. Es considerada como la mayor fiesta foklórica del continente americano, juntando en ella miles y miles de personas cada año. En esta celebración participan las celebraciones más representativas.
Si la visita a Oaxaca es en temporada alta, o durante las fiestas de la Guelaguetza, definitivamente crucial llegar con reservación en mano, es que Oaxaca es un lugar muy querido por los mexicanos, y quienes ya lo han visitado por lo general siempre aprovechan la primera oportunidad que tienen para regresar, ya sea por vacaciones, feriados puentes, días festivos o bien durante la Guelaguetza.
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