Los orígenes de la pastelería brasileña tienen una fuerte influencia de la dulcería conventual portuguesa que tuvo origen en el siglo XV, y que se basa en la confección de tortas compuestas de grandes cantidades de yema de huevo y azúcar. Las monjas eran conocidas por elaborar dulces y golosinas cuya preparación llevaba tiempo, paciencia y dedicación casi de carácter bíblico, para deleite de sus visitantes. Es que en aquella época se usaban unos hábitos con velos de gran tamaño y precisaban muchas claras de huevo para engomar algunas piezas específicas, de modo que permanecieran erguidas y rígidas.
De allí que les terminaran sobrando grandes cantidades de yemas que precisaban usar de alguna forma. A fin de evitar desperdicios, preparaban unos dulces memorables y deliciosos en los conventos.
Así surgió un dulce llamado “brisas do lis” que se hacía con muchas yemas de huevo, azúcar y almendras. El Quindim recuerda mucho a esa receta, pero en Brasil ganó un ingrediente especial: el coco, que sustituye a las almendras. La mezcla apareció en el nordeste, donde tuvo una gran influencia de los africanos, inclusive en el nombre. Quindim, en las lenguas bantúes, posiblemente significara “los gestos, comportamiento y humor típicos de las chicas adolescentes” En muchos idiomas africanos, quindim también significa “encanto” o “carisma”. Hasta el día de hoy, la creencia popular en el nordeste dice que “la muchacha que le prepara un quindim a su novio lo va a llevar al altar”.
Ingredientes
-18 Yemas de huevo
-500 g. de Azúcar
-250 g. de Coco rallado
Procedimiento
1- Empezamos pasando las yemas por un colador, para quitar cualquier grumo que pudieran tener, y las ponemos en un bol grande. Añadimos el azúcar y batimos con batidor hasta que esté todo bien integrado. Agregamos el coco rallado y volvemos a remover.
2- Untamos generosamente un molde de corona con manteca y lo espolvoreamos, también generosamente, con azúcar. Vertemos la mezcla en él, la tapamos con papel de aluminio y la dejamos reposar una hora.
3- Precalentamos el horno a 200ºC, ponemos una bandeja en el horno con agua hirviendo y dentro de ella el molde que teníamos preparado (sin retirar el papel de aluminio) y cocemos la masa al baño María una hora y cuarto aproximadamente o hasta que pinchando con un palillo este salga limpio. Dejamos enfriar antes de desmoldar.
Sobre La Cocina del Chaucha
Juan Pablo Novello (La Cocina del Chaucha) es un cocinero argentino con extensa trayectoria en el terreno gastronómico. Dentro del mismo, ha trabajado en Pepe Fechoría de Puerto Madero, entre otros espacios reconocidos. Hoy cuenta con su propio emprendimiento. Trabaja por pedido y también para empresas y eventos de toda clase.
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