LLega a Hasta Trilce (Maza 177, CABA) el show «Naides es más que Naides», de el Tata Cedrón y Rafael Urretabizkaya, en lo que prometen ser dos noches inolvidables, tanto el viernes 13 como el 19 de junio a las 20 horas.
Este espectáculo literario, poético y musical, es una declaración poética y política. Un cruce generacional y estético que toma las raíces del canto popular y la poesía para reinventarlas desde el presente.
A través de composiciones originales, recitados y versiones con impronta propia, Tata y Rafa invitan a una ceremonia de la palabra, la música y la belleza.
Es el encuentro artístico entre Juan «Tata» Cedrón (cantor, compositor y guitarrista), referente fundamental de la canción popular argentina, y Rafael Urretabizkaya (poeta, escritor, dramaturgo de títeres y maestro rural) gran artista radicado en San Martin de los Andes. Se suma a colaborar en esta aventura artística, Daniel Frascoli músico de largo recorrido junto al Tata.
El titulo evoca la voz de Don Jose Gervasio Artigas y su ética de lo humano, del encuentro y de la igualdad social. Desde esa raíz, ambos artistas construyen un repertorio que dialoga con la historia pero también con la urgencia del ahora.
Un encuentro imprescindible para quienes aman la música de raíz, con ideas y emoción. «Naides es más que naides» y el arte, cuando es verdadero, lo sabe.
Rafa Urretabizkaya describe este encuentro artístico:
«A Tata ya lo conocen, ni hace falta el apellido. Al otro según donde pregunte; por Pilo Lil, Huilqui Menuco, Las Ovejas, puede que tengan alguna referencia. Hacen canciones con un método sencillo. A veces Tata manda grabado el tarareo y Rafa pasa los versos a rayitas que después va completando con los versos. Otras veces primero van los versos de la cordillera a la ciudad y Tata los baja de un hondazo musical que para eso se crio amansando atardeceres en Camet cuando todo eso era campo y la puntería cosa seria.
Los dos dicen saber hipnotizar gallinas y jinetear caballo en pelo, pero pocos les creen. Cuando uno de los dos devuelve letra o música según le corresponda, el otro le responde: ´¡redondo!´.
Entonces hablan de ovejas enamoradas, del rastro que dejan los títeres, de la palabra humus, de que nadie sale segundo en la calesita, de los caballos partidos y la sed de los aljibes.
Los dos son parte de La Musaranga, ese lugar en el que a cada rato ´se suspende la tormenta pa´ que empiece la función´y donde ´naides es más que naides´ como bien dijo Artigas. Tata y Rafa dicen que si lo piden los corazones tendrán razones y además, que faltan circos en el mundo».
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