Lang Lang ha realizado un sueño de toda la vida al grabar el monumental trabajo de teclado de Johann Sebastian Bach, las «Goldberg Variations», a menudo descrito como «un Everest musical». Se lanzará a través de Deutsche Grammophon el 4 de septiembre en dos actuaciones complementarias ofrecidas por el pianista: la primera se grabó en una sola toma en concierto en el Thomaskirche en Leipzig, el lugar de trabajo de Bach durante casi 30 años y el sitio de su tumba; el segundo se hizo poco después en la reclusión del estudio. Las dos grabaciones se pueden comprar juntas como parte de una edición súper deluxe, el primer lanzamiento simultáneo mundial de álbumes en vivo y de estudio.
«Ahora tengo 38 años y, aunque eso no es viejo, creo que era el momento adecuado para una nueva etapa en mi desarrollo artístico», comenta Lang Lang. «Me mudé a un nuevo terreno con las Goldberg Variations y realmente me sumergí completamente en este proyecto. Mi objetivo como artista es seguir siendo más consciente de mi mismo y más informado, así como seguir ofreciendo inspiración a los demás. Es un proceso continuo, pero este proyecto me ha llevado un poco más lejos en el camino».
El largo viaje del pianista al alma de uno de los mayores hitos de la cultura mundial comenzó con lecciones de infancia en la música de Bach en su China natal. Tenía solo 17 años cuando tocó las «Goldberg Variations» de memoria para el director y pianista Christoph Eschenbach, una experiencia inolvidable para ambos músicos. Posteriormente, Lang Lang buscó el asesoramiento de expertos de los principales intérpretes de música del compositor, el director Nikolaus Harnoncourt y el clavecinista y primer especialista en teclado Andreas Staier entre ellos.
Habiendo permitido que su relación con el trabajo evolucione naturalmente con el tiempo, Lang Lang finalmente se sintió listo para grabar la gran Aria de Bach y sus 30 variaciones. A principios de marzo de 2020, poco antes de comenzar sus sesiones de estudio, hizo una actuación pública conmovedora de la obra en Leipzig. «Tocar en Thomaskirche, donde está enterrado Bach, fue increíblemente emotivo para mí», recuerda. «Nunca me sentí tan cerca de un compositor como lo hice durante ese recital. La versión en vivo es muy espontánea, mientras que en la versión de estudio mi interpretación es diferente, muy considerada y reflexiva. En una situación de concierto, experimenta el trabajo de 100 minutos en su conjunto. En el estudio, puedes concentrarte en detalles y matices individuales, y por supuesto eso puede afectar la experiencia musical de manera bastante sustancial”.
Se cree que Bach escribió las «Goldberg Variations» para su alumno, un virtuoso de clavecín adolescente llamado Johann Gottlieb Goldberg. El primer biógrafo del compositor informó que la pieza fue encargada por el embajador ruso en la corte de Dresde, un insomne, como un trabajo «relajante y alegre» para que el joven Goldberg tocara durante la noche. Publicado a fines de 1741, exige un enfoque espiritual total del artista.
«Este no es sólo el trabajo más excepcional y creativo en el repertorio del teclado, también es el más multidimensional», observa Lang Lang. «Nos permite aprovechar todo lo que tenemos dentro de nosotros mismos, pero también nos hace darnos cuenta de lo que falta y de lo que todavía tenemos que aprender».
Los comienzos de un gigante del piano
Lang Lang nació en Shenyang, Liaoning, China. Su padre Lang Guoren es miembro del clan Manchu Niohuru, que dio a luz una larga línea de emperadores Qing y también es músico y toca el erhu, tradicional instrumento chino de cuerda. A los 2 años, Lang vio el episodio The Cat Concertro de Tom y Jeery, en el que aparece la Rapsodia húngara N° 2 de Franz Liszt. Según Lang, este primer contacto con la música occidental es lo que lo motivó a aprender a tocar el piano. Comenzó a tomar lecciones de piano a la edad de 3 años con la profesora Zhu Ya-Fen. A los 5 años ganó el Concurso de Piano de Shenyang y tocó en su primer recital público.
Cuando Lang Lang tenía 9 años de edad, intentó hacer una audición para entrar en el Central Conservatory of Music de Beijing, y, al tener dificultades con sus lecciones, fue expulsado del estudio de su tutor de piano por «falta de talento». Otro profesor de música de su colegio notó la tristeza de Lang Lang, y decidió consolarlo reproduciendo un disco de la Sonata para Piano N° 10 en do mayor de Mozart; ella le pidió a él que tocara el segundo movimiento. Esto le recordó a Lang Lang su amor por el instrumento. «Tocar el K. 300 me dio esperanza de nuevo», recuerda Lang.
Lang Lang fue admitido poco después en el Conservatorio Central de Música de Pekín aún con 9 años, estudiando con el profesor Zhao Ping-Guo. En 1993, ganó la Competición de Piano Xing Hai Cup en Beijing y en 1994, a la edad de 11 años, ganó el primer premio por la actuación artística destacada en el Cuarto Concurso Internacional de Jóvenes Pianistas en Ettinger, Alemania. En 1995, a los 13 años de edad, tocó completos los 24 Estudios Op. 10 y Op. 25 de Chopin, en el Beijing Concert Hall y, en el mismo año, ganó el primer premio en el Concurso Internacional de Jóvenes Músicos de Chaikovski e Japón, donde tocó el Concierto para Piano N° 2 de Chopin, con la Oruqetsa Filarmónica de Moscú, en un concierto retransmitido por la cadena de televisión NHK. A los 14 años aparece como solista en el concierto inaugural de la Sinfónica Nacional de China, retransmitido por la cadena CCTV y a la que acudió el presidente Jiang Zmin.
Al año siguiente, con 15 años, él y su padre se fueron a América y comenzó a estudiar con Gary Graffman en el Instituto Curtis de Filadelfia.
Luego llegó el estrellato.
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