Por Jorge Daniel González.
El Quinteto Negro La Boca abrió las puertas del tango al mundo contemporáneo, a los ritmos y géneros que parecían incompatibles con el sonido tradicional de la música del Río de la Plata, pese a que en sus inicios lo afroamericano, la habanera europea y el criollismo gaucho fueron protagonistas.
Los lazos del círculo vuelven a conectarse en un tiempo donde la limitación sólo la establece quién no se permite aprender y ofrecer otros colores al arcoiris musical. Fue por eso que el bandoneonista y compositor rosarino Pablo Bernaba alertó su oído al entender con claridad que no hay límites para musicalizar y crear, a tal punto de lanzar el pasado 15 de mayo, por plataformas digitales, el segundo volumen de “Cruces Urbanos”, un encuentro con artistas y músicas de otros sonidos. “La producción de los dos volúmenes fue de cinco años. Se craneó en 2015, después de presentar el tercer disco, Tangos Libertarios, en donde nos encontramos con un público distinto a lo que presupone un grupo de tango como gente del punk y músicos de otros géneros. Si bien, veníamos haciendo cruces con el rap junto a Malena D´Alessio y la murga Falta y Resto, ese mismo año, sin darnos cuenta, decidimos encarar el proyecto ‘Cruces Urbanos’, inclusive armamos el festival de Tango-Punk con el grupo 2 Minutos. Empezamos a grabar en 2016 el primer volumen y ya en 2017 lo teníamos terminado estrenándose un año después. Teníamos material de sobra, y nos dimos cuenta que con un disco no nos iba a alcanzar”.
Por eso, en esta nueva entrega de “Cruces Urbanos”, existe una propuesta heterogénea, con variantes tímbricas, orquestales e invitados; además el tango se adapta a temas de rock como “Arrancacorazones” con Mariano Martínez, guitarrista y actual cantante de Attaque 77; “Razón de vivir”, con Víctor Heredia; “La Crudita”, con Miguel “Maikel” de Luna Campos y Martín “Mono” Fabio, ambos de Kapanga; “Chacarera del Exilio”, con el santiagueño Raly Barrionuevo; “Cuántas veces”, con el reconocido trompetista Hugo Lobo; “Son Song”, directamente junto a la orquesta de ska Dancing Mood, y “El arte de Sufrir”, con el grupo punk Responsables No Inscriptos, entre otros.
Una de las mixturas más relevantes del disco es de la mano de la joven trapera Dakillah, una de las freestyler más populares del país, que grabó la canción “Luna”: “La conocemos por ser de las artistas más representativas del Trap pero también porque trabaja en Sony como nosotros, y fue fácil contactarnos”.
Pablo destaca la intención de interacción con cada protagonista que aportó su voz y conocimientos en el nuevo Cruce: “Con todos los artistas tratamos de que la grabación no sea solo ese momento sino que el cruce sea más elaborado, que metan la cuchara, que participen, un cruce real más allá del estudio. Con Dakillah fue uno de los casos, cuando tocamos en una fecha de tango trap en Buenos Aires en 2019. Conocemos a los artistas que han participado luego de tocar juntos, como con Dancing Mood, Antonio Ríos, con el Chango Spasiuk, 2 Minutos, Responsables No Inscriptos; con todos hemos tratado de tener una interacción y nos quedó pendiente ahora compartir con los del segundo volumen, la presentación oficial”.
Uno de los temas más controversiales fue la creación de “Gato”, canción dedicada al ex presidente argentino Mauricio Macri y su gobierno neoliberal. Dentro de la temática conceptual, el tango mechado con cumbia funcionó como primer adelanto a Cruces Urbanos Volumen 2: “El tema lo pensé a fines de 2018 pero salió el año pasado como corte adelanto; nos hubiera gustado resolverlo antes pero fue un rato antes de las PASO”.
El otro corte adelanto fue “Paren de Matarnos”, tema de Miss Bolivia que forma parte de su disco Pantera (2017), y que ahora, El Quinteto grabó junto a ella y la tanguera Adriana Varela: “Nos interesaba la cuestión temática, de hecho, reformar la rebelión de la época. Habla de la trata, y el maltrato, problemáticas actuales que tomamos como bandera y compromiso de proponer un cambio interno para deconstruir el patriarcado y acompañar a las chicas en la lucha que es de todos”.
“Vos vivís en un verdadero tugurio”, dijo alguna vez el escritor Osvaldo Soriano a su amigo Osvaldo Bayer, para bromear sobre su casa de Belgrano, aquella donde se refugiaron libros y nacieron recuerdos y creaciones. Allí mismo, Pablo Bernaba pudo trabajar y charlar tantas veces junto Bayer para proyectar y concretar ideas. En el disco, otra excepción al concepto de cruce es “El Tugurio”, dedicado al historiador, escritor y periodista santafesino, tema grabado junto al cuarteto de cuerdas de Pablo Agri: “El Tugurio es el homenaje a Bayer, nuestro padrino, con quién trabajamos tanto tiempo como en el disco Tangos Libertarios. Allí fui muchas veces e inclusive en el videoclip de ‘Ruido’, del primer Cruce Urbano; hubo escenas filmadas en este lugar y fue su última participación haciendo de actor”.
Dos discos, muchos invitados, nuevas versiones y una posibilidad de ver al tango integrado a otros ritmos, dejan un ciclo terminado en cuánto a discos, pero no en lo musical: “Se podría crear material para un tercer cruce urbano pero pienso que ya está; marcamos muchísimos géneros; en este segundo, hay más artistas que el primero, folklore, punk, pasando por el ska, blues, rock barrial, chamamé, la cumbia, hemos abarcado el trap, rap, una cantidad de géneros y artistas impresionantes, creo que es el fin de un proceso de cinco años, y contento con el resultado”.
Aunque Pablo destaca un ciclo terminado, aún le queda un color más para sumar a la apuesta futura y es la incorporación del Sitar, instrumento de cuerdas indio-pakistaní, con el que dejó un pequeño adelanto en un video grabado con celulares, que publicó el Quinteto Negro La Boca por las redes el 6 de abril pasado: “Lo íbamos a incorporar para una presentación en el CAFF, en Capital Federal pero todo se detuvo con el parate por la Pandemia. Hoy, está en carpeta el sitar y lo mostramos un poco en el video tango – punk ‘Ya no sos Igual’ de 2 Minutos”. El aislamiento social es un tema delicado para los artistas y sus ingresos, pero también para la sociedad, que lleva meses adaptándose a las nuevas formas de sobrellevar los días. Por este motivo, Bernaba imparte opinión autorizada, como docente e integrante de la comunidad que se reinventa en tiempos de cuarentena: “Me parece bien que el Estado intervenga con compromiso social y llegue donde no haya llegado antes, siempre y cuando no haya represión, que sea para ayuda realmente. No me gusta la cuestión que se instaló, medio policial, de buchonear y generar miedo a quién no cumple, alentada por el Estado y los Medios. Me gusta que se acompañe en los barrios, pero no me gusta que le paguen los sueldos a Clarín; no me gusta que se hayan bajado los sueldos a muchos trabajadores pero me gusta que se congelen las tarifas: hay de cal y de arena. Hay distintas acciones pero en muchas, queda demostrada la miseria del humano. No soy optimista en cuanto a que esto muestra solidaridad, más veo lo negativo. Entiendo el momento particular pero hay que tener cuidados. Yo soy docente y estoy con cuarentena cómoda, y como grupo musical, si bien no nos podemos juntar, estamos conectados y unidos para ayudar a quién lo necesite”.
«Cruces Urbanos Vol. 2», para escuchar en Spotify: https://open.spotify.com/album/6QHDcnJ1WQHfJzcgf50OMR
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