Lady Gaga fue la responsable de organizar el evento online Global Citizen: «One World Together At Home», que reunió en la pantallas de yotube y otras redes sociales a consagrados artistas del planeta, tales como John Legend, Celine Dion, Sheryl Crow, Elton John, Billie Eilish, y una lista larguísima más, que se reunió, desde ayer sábado a las 20 horas y duarnte una maratón horaria en apoyo a la lucha contra el Coronavirus Covid – 19, que sacude el mundo.
Sin duda, a nivel mundial, la aparición de los británicos The Rolling Stones fue el momento más esperado. De pronto las redes sociales trascendentales como Youtube, Facebook y Twitter explotaron con millones de personas que se sumaron en computadoras, celulares y otras plataformas cuando sucedió.
En una pantalla dividida en cuatro casilleros, la transmisión empezó con la bienvenida de Mick con una guitarra electroacústica, comenzando a entonar los acordes de la melodía de «You Can’t always Get What You Want», canción del disco «The Rolling Stones Rock And Roll Circus», del año 1968.
Luego se sumó Keith Richards, también con una guitarra electroacústica, delante de una mesa ratona con un enorme libro sobre la mima; detrás llegó la imágen, en la parte inferior izquierda de la pantalla el inefable Ronnie Wood, guitarra eléctrica en mano, todos tocando sus respectivos instrumentos.
La sorpresa llegó cuando fue la aparición del cuarto Stone, Charlie Watts, en el último casillero inferior, quien comenzó a hacer los típicos movimientos con sus baquetas, sin embargo lo hacía sin una batería presente. A pesar de ello, logró hacer los movimientos exactos, ya sea para hacer sonar los «supuestos» tambores o el platillo.
Alegres, con la energía típica que los caracteriza, sin duda una se trató de interpretación magistral de los Rolling, que animó a sus fanáticos del globo entero a participar lanzando comentarios fabulosos en las redes sociales, en esta época de aislamiento por la cuarentena por el Coronavirus.
Charlie Watts siempre ha sido el miembro más enigmático de la banda, por lo que, naturalmente, su batería de aire fue inexplicable. ¿Simplemente no quería instalar un kit? ¿Quién estaba proporcionando la percusión que no estaba a la vista? Realmente fue lo más llamativo de la formidable aparición del conjunto británico más antiguo del mundo. Watts, sentado en una habitación de aspecto acogedor, forrada con un estante de discos del piso al techo, el mayor de los cuatro integrantes, con 78 años de edad, transparentaba una alegría de estar tocando, a su manera, aparentemente contra cajones de cuero y madera y el apoya brazos de un sillón grande, en lugar de platillos y tambores.
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