El viernes pasado estuvimos en Bebop Club, en el concierto que ofreció String Triory, un trío que versiona canciones de Queen, Frank Zappa y Luis Alberto Spinetta, entre otros próceres musicales. Lo hace en clave de jazz. En esta crónica te contamos de qué se trata.
Por Lucía Salto / Fotos: Fernando Ibarra
El viaje comenzó el viernes 02 de agosto a la medianoche, cuando todos los sentidos se agudizan. Escuchar un conjunto de cuerdas y composiciones armónicas en Bebop Club fue la carta de presentación para que la velada sea inolvidable.
Noche fría, como cualquier invierno; sin embargo cada mesa contigua pudo conectarse más allá de lo efímero. De eso se trata String Triory, un trío de jazz / vocal que propone y dispone, de texturas melódicas en donde el espacio y tiempo se mezclan, para crear un ambiente propio en la escena local.
Fue la presentación del disco oficial de éste grupo “Hard Bop”, en donde Marcelo Lupis en voz / violin, Rodrigo Agudelo en guitarra y Jerónimo Carmona en contrabajo, desplegaron un repertorio con formas fractales y polifonías, consiguiendo crear paisajes que fueron desde versiones de Weird fishes (Radiohead) hasta Outside Now (Frank Zappa), frente a un público estratégicamente ubicado de forma contigua, en mesas redondas, con veladores tenues, como si se tratara de un club de jazz “vintage”, todo en color rojo opaco, y con una calma muy propia de ése género tan particular.
Cócteles de diferente tipo se sirvieron durante la noche, y fueron el hilo conductor para que la lista de canciones prosiguieran sin descanso, deleitando en cada canción. En vivo, los arreglos se pudieron observar como improvisación y si bien la elección de las cuerdas y su intercalación no fue tarea fácil, String Triory hizo posible esa conexión, tanto con el lugar como con el público.
Otras versiones como “Nude” (Radiohead), “Voy qui passed sans me voir” (Grappelli) y “Painted from Memory” (Bacharach / Costello) fueron el punto de partida para un acercamiento formal a los presentes: de la música se encargaron ellos, aplicando su propia impronta y pisando un campo de improvisación complejo y acertado.
No podía faltar algo nacional, como fue el caso de “Canción de 2 x 3” (Charly García) y “Tocando sin sentir” (Luis Alberto Spinetta), cuya ejecución generó una inmediata emoción, importante, entre todos los presentes.
Como desenlace del show, la legendaria banda Queen fue una elección propicia con el temazo “I’m going slightly mad”, generando un aplauso unánime de pie, frente a un club musical cargado de jazz y elegancia.
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